Los caballos eran animales muy importantes en la era Vikinga, y aun hasta nuestros días son muy valorados por los pueblos escandinavos.
Los caballos originales de la antigüedad eran de dos tipos: Unos eran pequeños, de patas cortas y fuertes, de cuello grueso y pelaje espeso. A este tipo se le conoce como caballo islandés, porque aun en nuestros días es posible encontrar este tipo de caballos en la isla.
Eran usados para moverse en la nieve, entre otras cosas.
Había también un segundo tipo, éstos eran caballos que eran especialmente criados y elegidos para cabalgar o para peleas de caballos. Los ejemplares más hermosos y grandes generalmente eran de grandes Jarls o chieftains. Estos eran particularmente comunes en el sur de Suecia donde se les criaba con mucho esmero.
Los caballos servían un gran número de propósitos en la sociedad vikinga; se usaban para cabalgar, los hombres pobres lo hacían a pelo, pero los nobles lo hacían con sillas talladas de madera y adornadas con incrustaciones de metal, generalmente iban recubiertas de lana y cuero para hacerlas mas cómodas; los estribos eran de metal y a veces también eran adornadas. Las bridas llevaban muchos adornos de bronce o cobre con lindos diseños. Algo muy común era encontrar que se les colgaban cascabeles o campanas, quizás para alejar a los malos espíritus, quizás para encontrarlos mas fácilmente entre la niebla y nieve.
Los potros también eran criados para pelear. En algunos lugares de Noruega también se llegó a organizar carreras de caballos, se elegía el mejor de cada región y se hacían competencias entre ellos, los jinetes iban a pelo y fustigaban tanto al caballo como a los otros jinetes. Generalmente el final de la carrera venía tras un salto espectacular desde alguna roca para darle más emoción a la carrera.
Generalmente los vikingos no luchaban a caballo, aunque si usaban sus caballos para llegar rápidamente a las batallas, pero entonces desmontaban y luchaban a pie.
En las granjas también eran útiles pues se utilizaban para jalar cosas pesadas o arar para la siembra. Como los inviernos son tan crudos, en el otoño se seleccionaban los animales fuertes que podrían sobrevivir, y el resto eran sacrificados, algunas veces como ofrendas a los dioses.
Servían para tirar de trineos y carretas, y las bridas y riendas eran bastante avanzadas, ya que les permitían tirar de un arado sin asfixiarlos como pasaba con los que estaban diseñados para usar en toros.
Los caballos blancos eran los mas preciados, pero también los negros y rojos; se decía que los caballos podían dar mensajes de los dioses y muchas veces se utilizaban para saber lo que deparaba el destino por sus movimientos y comportamiento.
El potro era el símbolo de Freyr y había caballos que se criaban exclusivamente para sus ritos, estos caballos no podían ser montados por ningún hombre y se reservaban para sacrificios.
Salu t a todos y que sea rock!